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¿El COVID 19 tuvo un impacto en la priorización de lograr una cadena de abastecimiento sostenible?

Por tercer año consecutivo y aún en un contexto de pandemia (2021) se ha presentado el informe anual State of Supply Chain Sustainability a cargo del Centro de Transporte y Logística del MIT y el Consejo de Profesionales de Gestión de Abastecimiento.
Los datos recogidos indican que aun en una etapa de pandemia y con recorte de nivel de inversiones, los objetivos y esfuerzos de tener una cadena de suministro sostenible no han dado marcha atrás.

Entendiéndose el concepto de CSS como:
“Gestión de los impactos ambientales y sociales dentro y a través redes formadas por proveedores, fabricantes, distribuidores y clientes en línea con las metas de ONU y su empuje a la sostenibilidad. Esto abarca todas las fases del suministro cadena, desde el abastecimiento y extracción de materias primas hasta el uso y fin de la vida del producto”. 

El estudio arroja datos interesantes como el origen (principales stakeholders) y nivel de presión para lograr la sostenibilidad.

nivel de presión
Fuente: State of Supply Chain Sustainability-MIT

Así mismo se indican las principales áreas sobre la cuales las empresas enfocan sus esfuerzos para generar una cadena de abastecimiento sostenible.

covid 19
Fuente: State of Supply Chain Sustainability-MIT

Uno de los aspectos más importantes ha sido las partes que ejercen presión para mantener una cadena sustentable, en el 2020 se registró un crecimiento considerable a la presión percibida proveniente de los inversores y estados, así mismo se registró que uno de los enfoques más importantes para las empresas a nivel de sostenibilidad es el relacionado al bienestar de las personas y empleados, así como la igualdad e inclusión de proveedores.

En MANDO estamos comprometidos en alinear e integrar practicas sostenibles a nuestro modelo de negocio, con el fin de contribuir al bienestar de la sociedad y un mejor lugar para que nuestro equipo desarrolle sus capacidades en un entorno que busca mitigar los impactos medioambientales.

Fuentes:
– State of Supply Chain Sustainability – MIT